Avivamientos y la luz del mundo

Avivamientos

Bautismo de fuego.
Frank W. Sandford en 1894 fundo la escuela del Espíritu santo, la iglesia del Dios vivo y finalmente la iglesia del Reino. Predicaba sobre los dones de hablar en lenguas. Sandford creía que Dios le hablaba y que él era la encarnación de David y el profeta Elías. El siguiente año 1895 Benjamín Hardin Irwin formulo la idea de que existía una tercera bendición llamada el bautismo de fuego. Fue un estudioso de los escritos de John Wesley y John William Fletcher. Se bautizo y fue ministro en la iglesia bautista, después se convirtió a la iglesia de la santidad y fue ministro de la iglesia metodista antes de fundar su propia iglesia Fire-Baptized Holiness Church. 

Bautismo del espíritu santo.
El alumno de Sandford y Hardin Irwin, Charles F. Parham fundo la escuela Bethel Bible College en Topeka, Kansas en 1900. Con la enseñanza de sus maestros construyo la doctrina del hablar en lenguas como evidencia del bautismo del espiritusanto. En 1901 bautizo con el espíritu santo a un grupo de sus alumnos quienes se dice comenzaron a hablar en lenguas para abril del mismo año se desbando el grupo de estudiantes. Ellos alegaban que el hablar en lenguas eran solo simulaciones. 

Los Avivamientos origen.
El alumno de Parham, William J. Seymour en 1906 comienza a predicar la doctrina del bautismo del espíritu santo, en Los Ángeles California. El 9 de abril se reúnen personas de diferentes creencias y razas, entre ellos bautistas, menonitas, cuáqueros, presbiterianos, espiritistas e hipnotistas. Para celebrar los bautismos por el Espíritu Santo o también llamados avivamientos. A este movimiento se le llamo Asuza Street. El 13 de abril se bautiza por el espíritu santo al primer mexicano. Ese mismo año William J. Seymour escribe a Charles F. Parham para pedir ayuda tras manifestaciones de espiritismo, hipnotismo y contorciones carnales en las reuniones. En octubre de 1906, Parham visita a Seymour en Azusa St. y escribe: - "Sentado en la plataforma de la iglesia en Azusa St. Para mi total sorpresa y asombro, encontré condiciones aún peores de las que había anticipado vi manifestaciones de la carne, controles espiritistas, personas que practicaban hipnotismo en el altar sobre personas que buscaban el bautismo; aunque muchos estaban recibiendo el verdadero Bautismo del Espíritu Santo ". El rito de avivamiento, consistía en arrodillarse, llorar, gemir, gritar, correr en círculos, saltar, patear, rodar por el piso, cantar himnos y fanatismo, denunciaba Parham. En Diciembre Seymour anuncia que Parham no es el líder del movimiento de Azusa St. y cortan la colaboración entre ambos. Así se creó la doctrina de los avivamientos, una mezcla de la libre interpretación de la biblia y rituales de ocultismo.

Sus enseñanzas a través de su alumno William Seymour crearon un sentido de unidad que no duro mucho y causo una división inmensa de nuevas iglesias. En 1910 Parham publicó un artículo hablando del fanatismo y el control de espíritus ajenos controlando a las personas dentro de la doctrina que él había creado. Hablaba que había necesidad de volver al cristianismo primitivo.

La migración de los avivamientos a México
En Azusa St fueron evangelizados Juan Navarro, quien evangelizo a Marcial de la Cruz y Francisco Llorente quien bautizo a Romana C. Valenzuela, ella llevo la doctrina a México y dio pie a la fundación de la Iglesia apostólica de la fe en Cristo Jesús, la iglesia cristiana espiritual y la luz del mundo. Los primeros 12 bautizados en nombre del espíritu santo fueron bautizados por Romana C. Valenzuela y todos eran sus familiares. Así se pasa esta práctica de Romana C. Valenzuela a Miguel García y de este a Francisco Borrego quien la ensena a Eusebio Joaquín González. Esta práctica se ha llevado a cabo en la luz del mundo desde que Eusebio Joaquín era miembro y pastor asociado de la iglesia cristiana espiritual de Francisco Borrego. Antes de 1937 este sellamiento se acompañaba de la práctica del descalzamiento, según lo había establecido Eusebio. En la luz del mundo se le conoce como avivamientos espirituales donde se recibe la prenda del espíritu santo y quedan sellados en el espíritu. Actualmente el rito consiste en estar hincado orando hasta que se “hable en lenguas”. Después se les reconoce con un certificado que entregado en una ceremonia de bienvenida.
Los avivamientos son una práctica generalizada en los movimientos pentecostales y apostólicos unicitarios.